Dia del Trabajador
No se contenten solo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica. El que escucha la palabra, pero no la pone en práctica es como el que se mira el rostro en un Espejo y, después de mirarse, se va y se olvida en seguida de cómo es. Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído, sino haciéndolo, recibirá bendición al practicarla. (Santiago 1:22-25 NVI)
Querida familia en Cristo,Comenzamos el mes de septiembre con el Día del Trabajo, el último día no oficial del verano y un fin de semana de tres días en el que se tomar un descanso y relajarse. El Día del Trabajo fue creado para honrar a aquellos que trabajaron en las fábricas, a menudo durante más de 12 horas al día y 6 días a la semana en condiciones difíciles y peligrosas. Agradecemos a Dios que tenemos leyes que protegen a los trabajadores para que podamos trabajar en condiciones más saludables que hace un siglo.
En el primer capítulo de Santiago, el autor también habla sobre el trabajo: ser hacedores de la palabra y no simplemente oyentes. ¿Cómo podemos ser “hacedores” más que oyentes? Estamos llamados a actuar por los demás, recordando que somos como los que nos rodean, seres humanos que luchan por sobrevivir y desean prosperar, que buscan la justicia, la libertad y el amor. Nosotros en la ELCA somos conocidos como la iglesia “El trabajo de Dios, nuestras manos” porque creemos que la gracia de Dios nos ha liberado para amar y servir a los demás.
Mi oracion para que continuemos siendo las manos de Dios en nuestro mundo mientras trabajamos juntos,
Pr. Ellen